Entendiendo el lenguaje de los edulcorantes
Entendiendo el lenguaje de los edulcorantes, en la web existe mucha información sobre los edulcorantes, en su mayoría con un lenguaje ajeno para nosotros debido a sus términos químicos, por eso hemos decidido plantear este tema de manera cercana, atendiendo a las inquietudes generales. Hay que ser muy meticuloso al elegir los edulcorantes que consumimos pues muchos de ellos no te dicen la verdad de su origen.
¿Cuál es la diferencia entre el azúcar y el edulcorante?
Lo primero que debemos saber es que la palabra edulcorante es todo lo que endulza, eso incluye a los componentes de origen natural y a artificial, a los dietéticos y a los no dietéticos.
El azúcar es un edulcorante que proviene de la caña, de la fruta o de los lácteos (dependiendo de su presentación) y por consecuente es considerado natural, el problema principal con los edulcorantes naturales es que contienen alto índice calórico. Sin embargo la azúcar refinada, cuya presentación es la más común entre todas las variaciones, pasa por un proceso de refinamiento que elimina todo el beneficio nutritivo y sólo reserva la bomba calórica.
Por otra parte, los edulcorantes artificiales creados, en su mayoría, en un laboratorio químico utilizan moléculas para obtener un endulzante que, por menos gramos aportados, ofrece menos calorías y más dulzor; a estos se le llaman edulcorantes sintéticos.
Los edulcorantes sintéticos y sus diferentes presentaciones:
Los edulcorantes sintéticos o artificiales no son nuevos en el mercado, por años se han utilizado para hacer consumible muchas de las cosas que tomamos usualmente como refrescos, remedios, embutidos, alimentos procesados y tantos otros que han estado en los anaqueles desde siempre; estos endulzantes son llamados aditivos edulcorantes y suelen ser dañinos para el organismo, además su uso no es apto en la preparación de comidas, ya que sólo bajo el proceso de máquinas industriales se logra extraer el dulzor de manera correcta ya que muchas veces es sólo una simulación de azúcar.
El producto que sí es relativamente nuevo es el edulcorante bajo en calorías, cuyo uso es para preparaciones ordinarias; su principal cambio es la sustitución de los hidratos de carbono, hallados en los edulcorantes naturales, por otras moléculas que cumplen con la función de endulzar. Los también llamados edulcorantes fuertes pueden provenir de componentes naturales, sin embargo su extracción es menos refinada, o su procedencia viene de plantas o hierbas.
Beneficios de los edulcorantes bajos en calorías:
Las organizaciones dedicadas a la nutrición a nivel mundial han estado en una lucha permanente para eliminar el consumo de azucares en nuestra dieta diaria. Idealmente deberíamos consumir únicamente el azúcar que nos brindan las frutas y verduras, pero como esa verdad es muy lejana a los ojos de los especialistas, ellos han aceptado la inclusión de edulcorantes que aporten el sabor y reduzcan las calorías.
En comparación a la azúcar refinada, los edulcorantes bajos en calorías benefician nuestra salud en estos aspectos:
• Podemos controlar nuestro peso. Los nutrientes son pocos, es verdad, pero su correcto uso logrará que las calorías ingeridas diariamente sean menos.
• Reducir riesgos diabéticos. El nivel de azúcar en la sangre no es interferida por la ingesta de estos edulcorantes debido a que no contienen hidratos de carbono.
Los edulcorantes artificiales están sometidos a un estudio constante pues como todo suplemente creado en un laboratorio no es totalmente recomendable para el cuerpo, no obstante, cada vez son más las variaciones de estos sustitutos que se acercan a los componentes naturales y que aseguran la preferencia de sus consumidores y la aprobación de los especialistas.